Los libros electrónicos vs. los libros impresos: una comparación. A lo largo de los años, los libros electrónicos se han convertido en un pilar de la industria editorial. Sin embargo, las predicciones sobre la desaparición de los libros impresos como resultado de la introducción de los libros electrónicos no se han materializado hasta la fecha.

Situación actual de la industria editorial

Al cierre de 2023, la industria estaba en aumento un 0.4% respecto a 2022, con ingresos totales de todas las categorías alcanzando los $12.6 mil millones. En general, los libros impresos experimentaron disminuciones en los ingresos, mientras que los ingresos de los libros electrónicos aumentaron solo un 0.6%. Veamos más a fondo ambas opciones y la industria editorial en general.

Historia reciente de los libros impresos y los libros electrónicos

Según la Asociación de Editoriales Estadounidenses, las ventas de libros electrónicos en Estados Unidos descendieron un 1.5% en el primer trimestre de 2024 en comparación con los primeros tres meses de 2023, alcanzando un total de $255.6 millones en ingresos. Actualmente representan el 12% de las ventas totales de libros al consumidor. A lo largo del tiempo, su participación en el mercado ha ido aumentando, pero los libros de tapa dura y de bolsillo siguen dominando el mercado, con aproximadamente $3.3 mil millones y $3.1 mil millones en ventas en 2023, respectivamente.

La pandemia de COVID-19 en 2020 fue un impulso para la edición en papel. Las ventas aumentaron un 8.2% interanual hasta un total de 751 millones de ejemplares, según Printing Impressions, una revista de la industria editorial. El aumento del tiempo libre y la necesidad de educar a los niños en casa fueron citados como razones para la fiebre de compra de libros.

Libros impresos

Los libros impresos tienen la sensación de un libro que muchos lectores aman. Puedes sostenerlo, pasar las páginas y sentir el papel. Las ilustraciones en papel suelen ser de mayor calidad de lo que incluso los e-readers de alta gama pueden reproducir. Algunos lectores también experimentan fatiga visual al usar un dispositivo electrónico en lugar de un libro impreso.

Libros electrónicos

Los libros en papel son difíciles de transportar, especialmente los de tapa dura. Si eres un ávido lector y vas de viaje, o si simplemente sales a un café, un e-reader o iPad es una carga mucho más ligera que un libro o un montón de ellos. Además, los compradores de libros electrónicos tienen la ventaja de que Internet brinda a los consumidores de cualquier producto: sin restricciones de espacio. Casi todo lo que se ha publicado está disponible, todo el tiempo.

Consideraciones especiales: el negocio editorial

Los libros electrónicos pueden omitir algunos de los costos tradicionales de publicación, pero imponen otros costos. Los costos adicionales de tecnología implican formatear el libro electrónico para que varios dispositivos electrónicos y navegadores puedan descargar y almacenar correctamente el libro.

Ya sea impreso o descargado, un porcentaje del precio del libro electrónico debe pagarse a vendedores en línea como Amazon y Barnes & Noble. Esto puede representar entre un 30% y un 70% del precio de venta.

Libros impresos, libros electrónicos y finanzas personales

Con la visión general de la industria detrás de nosotros, hablemos sobre las finanzas de poseer libros. Hay varias consideraciones de finanzas personales que determinan cuál comprar:

Costo inicial

  • Adquirir un e-reader puede implicar una inversión inicial más alta que comprar un solo libro impreso. Sin embargo, la ventaja económica radica en el ahorro a largo plazo, ya que es posible que los libros electrónicos estén más bajos de precio que sus contrapartes físicas.

Costos de suscripción

Los servicios de suscripción como Kindle Unlimited o Audible ofrecen una forma rentable de acceder a una vasta biblioteca de libros electrónicos. Desde un punto de vista económico, estos servicios pueden reducir significativamente el costo por libro para los lectores ávidos, convirtiéndose en una opción inteligente financieramente en comparación con la compra de libros individuales.

Valor de reventa de libros

El valor de reventa de los libros impresos agrega una dimensión económica a la posesión de una colección impresa. Las librerías de libros usados, plataformas en línea e intercambios de libros brindan caminos para recuperar parte de la inversión inicial en libros impresos. Desafortunadamente, los libros electrónicos carecen de un mercado de reventa, lo que los hace menos flexibles financieramente en este aspecto.

Costos de almacenamiento

Los libros impresos incurren en costos de almacenamiento en términos de requisitos de espacio y muebles como estanterías. La ventaja económica de los libros electrónicos es que eliminan la necesidad de almacenamiento físico o gastos de mudanza adicional, lo que significa que los lectores pueden acumular una vasta colección sin costos adicionales.

Impacto ambiental

Desde una perspectiva económica, el impacto ambiental de los libros impresos, incluidos los costos de producción y eliminación, contribuye a su gasto total. Los libros electrónicos, desafortunadamente, pueden no ser tan sostenibles como se podría pensar. El continuo uso de electricidad y el uso de combustibles fósiles para generarla significan que los libros electrónicos todavía contribuyen a costos ambientales, solo de una manera diferente que los libros impresos lo hacen.

Costos de producción y distribución

El costo de producir y distribuir libros impresos abarca gastos relacionados con papel, impresión, transporte y almacenamiento. Los libros electrónicos evitan estos costos, ofreciendo un modelo potencialmente más económicamente eficiente para editores y autores. Aunque los costos pueden variar según cada libro y género, el costo total de autoeditar un libro se estima de manera no oficial en varios miles de dólares.

Accesibilidad

La ventaja económica de los libros electrónicos en términos de accesibilidad es evidente para los lectores con discapacidades visuales. Los formatos digitales permiten funciones como el ajuste del tamaño de texto y la tecnología de lectura de pantalla, mejorando la experiencia de lectura para un público más amplio.

Conclusión

Los libros electrónicos ofrecen una solución potencialmente rentable para los lectores ávidos. La ausencia de costos de producción física, la reducción de las necesidades de almacenamiento y las frecuentes promociones digitales pueden hacer que una biblioteca digital sea más rentable. Por otro lado, los libros impresos pueden tener valor de reventa, sin costo de suscripción y un mayor atractivo sentimental para los lectores tradicionales. Hay muchos factores a considerar al elegir entre libros electrónicos y libros impresos desde una perspectiva financiera.