Según Investopedia, si te estás acercando a la jubilación y has ahorrado menos de lo que deseas, existe la posibilidad de que puedas vivir solo con la Seguridad Social, pero necesitarás un plan para que funcione. Es importante tener en cuenta que la Seguridad Social fue diseñada para ser un complemento a tus ahorros para la jubilación, cubriendo solo el 40% de tus ingresos previos a la jubilación.

¿Qué hacer para vivir solo con la Seguridad Social?

Sin embargo, si te ves en la necesidad de depender de la Seguridad Social para cubrir la mayoría de tus gastos de subsistencia, no estás solo. Aproximadamente el 12% de los hombres y el 15% de las mujeres dependen de la Seguridad Social para el 90% o más de sus ingresos en la jubilación, y el 37% de los hombres y el 42% de las mujeres dependen de ella para cubrir más de la mitad de sus gastos de vida en la jubilación.

¿Por qué es importante planificar estratégicamente?

Depender de la Seguridad Social como tu principal o única fuente de fondos requiere cierta planificación estratégica. Es probable que debas disminuir significativamente tus gastos de subsistencia y vivir de manera frugal. Aquí te presento cinco consejos para ayudarte a lograrlo:

1. Retrasa la solicitud de la Seguridad Social

Tu edad de jubilación completa es de 67 años si naciste en 1960 o después, y de 66 años si naciste antes de 1960. Puedes comenzar a recibir tus beneficios de la Seguridad Social a partir de los 62 años, pero se reducirán por cada año que los tomes por adelantado.

Por otro lado, si puedes posponer la solicitud de beneficios más allá de tu edad de jubilación completa, verás aumentar tu cheque mensual hasta los 70 años aproximadamente un 8% por año. Después de los 70 años, no hay beneficio en seguir retrasando la solicitud.

Importante: Se prevé que los fondos del sistema de Seguridad Social se agoten en 2033. En ese momento, si no se realizan cambios, el sistema solo podrá pagar el 79% de los beneficios programados.

2. Reducción de gastos en vivienda

Mudarte a una vivienda menos costosa puede tener un impacto significativo en tu flujo de efectivo mensual. Idealmente, si tienes una hipoteca, deberías haberla pagado por completo antes de comenzar a vivir solo con la Seguridad Social. Sin embargo, seguirás teniendo otros gastos relacionados con la vivienda como impuestos a la propiedad, servicios públicos y, en algunos casos, cuotas de la asociación de propietarios.

Los costos de vivienda pueden fácilmente consumir la mayor parte de tus beneficios de la Seguridad Social si siguen siendo una gran parte de tu presupuesto.

3. Cambio de domicilio

Mudarte a una vivienda menos costosa en tu ciudad actual puede liberar efectivo para la jubilación. Pero en algunos casos, un cambio más significativo, como mudarte a otro estado o incluso al extranjero, puede valer la pena considerar para reducir otros costos de vida.

Si vives en un estado con un alto costo de vida y altos impuestos, mudarte a un estado con un costo de vida más bajo y impuestos más favorables puede facilitar el ajuste de tu presupuesto.

4. Simplificación de tus otros gastos

Después de hacer más asequibles tus costos de vivienda, el siguiente paso es reducir otros elementos de tu presupuesto, como facturas de servicios públicos, gastos de transporte y costos de alimentos.

La pregunta clave que debes hacerte es: ¿De qué puedes prescindir? Considera lo que necesitas para tener una jubilación placentera. ¿Podrías prescindir de la televisión por cable, por ejemplo, a favor de ver programas por Internet? ¿Podrías cambiar un hobby costoso como el golf por uno más económico como la jardinería? Estas decisiones pueden ser difíciles, pero pueden hacer que tu transición a la jubilación con beneficios de la Seguridad Social sea mucho más sencilla a largo plazo.

5. Control de costos de atención médica

La atención médica en la jubilación puede ser extremadamente costosa, por lo que necesitas un plan para pagarla, especialmente si tienes una condición médica existente.

Aunque Medicare puede cubrir algunos costos una vez que cumplas 65 años, no paga todo. Si te has jubilado y tus ingresos provienen exclusivamente de la Seguridad Social, deberás buscar más allá de Medicare para cubrir tus gastos médicos.

Medicaid, por ejemplo, está disponible para personas de bajos ingresos y puede ayudarte a pagar primas y cubrir lo que Medicare no incluye, incluido el cuidado a largo plazo.

Conclusión

Vivir únicamente con la Seguridad Social está lejos de ser ideal. Si todavía tienes tiempo antes de jubilarte, considera buscar formas de aumentar tus ahorros. Si es posible, comienza a contribuir tanto como puedas al plan de jubilación de tu empleador, especialmente si tu empleador ofrece una contribución correspondiente.

Si no tienes un plan 401(k) u otro similar en el trabajo, una cuenta individual de jubilación (IRA) es otra forma de hacer crecer tus ahorros. Cuanto más reserves ahora, menos presión sentirás para hacer rendir tus beneficios de la Seguridad Social.

De todos modos, si debes hacer rendir tus beneficios, la reducción de tamaño, la mudanza, la reducción de gastos, el control de los costos de atención médica y el retraso en la solicitud de la Seguridad Social pueden marcar una gran diferencia en tu presupuesto.