Una estrategia de inversión a largo plazo implica mantener las inversiones durante más de 12 meses. Esto incluye activos como bonos, acciones, fondos cotizados en bolsa (ETF), fondos mutuos, y más. Requiere disciplina y paciencia para tomar un enfoque a largo plazo. Esto se debe a que los inversores deben ser capaces de asumir cierta cantidad de riesgo mientras esperan recompensas más altas en el futuro.

¿Qué es la estrategia de inversión a largo plazo y por qué es importante?

Invertir en acciones y mantenerlas es una de las mejores formas de hacer crecer la riqueza a largo plazo. Por ejemplo, el índice S&P 500 experimentó pérdidas anuales solo en 13 años entre 1974 y 2023, demostrando que el mercado de valores genera rendimientos mucho más a menudo de lo que no lo hace.

  • Las inversiones a largo plazo en acciones tienden a superar a las operaciones a corto plazo al momento de cronometrar el mercado.
  • La negociación emocional tiende a obstaculizar los rendimientos de los inversores.
  • El S&P 500 registró rendimientos positivos para los inversores en la mayoría de los períodos de 20 años.
  • Resistir las caídas temporales del mercado se considera a menudo como una señal de un buen inversor.
  • Invertir a largo plazo reduce los costos y te permite acumular ganancias de los dividendos.

¿Por qué las inversiones a largo plazo generan mejores rendimientos?

El término clase de activos se refiere a una categoría específica de inversiones que comparten las mismas características y cualidades, como activos de renta fija (bonos) o valores, comúnmente llamados acciones. Si observamos varias décadas de rendimientos de clases de activos, veremos que las acciones generalmente superan a casi todas las demás clases de activos. Por ejemplo, el S&P 500 devolvió un promedio geométrico del 9.80% por año entre 1928 y 2023.

¿Por qué es importante montar las subidas y bajadas del mercado?

Las acciones se consideran inversiones a largo plazo. Esto se debe en parte a que no es inusual que las acciones caigan un 10% a 20% o más de valor en un período de tiempo más corto. Los inversores tienen la oportunidad de montar algunas de estas subidas y bajadas durante muchos años o incluso décadas para generar un mejor retorno a largo plazo.

¿Por qué las decisiones son menos emocionales y más lucrativas a largo plazo?

Uno de los defectos inherentes en el comportamiento del inversor es la tendencia a ser emocional. Muchas personas afirman ser inversores a largo plazo hasta que el mercado de valores comienza a caer, momento en el que tienden a retirar su dinero para evitar pérdidas adicionales. Según el estudio de Análisis Cuantitativo del Comportamiento del Inversor de Dalbar, el S&P 500 tuvo un rendimiento anualizado promedio del 9.65% durante el período de 30 años que terminó el 31 de diciembre de 2022.

¿Qué beneficios fiscales se obtienen al mantener una acción a largo plazo?

Los beneficios provienen de las ganancias de capital obtenidas al vender cualquier activo de capital. Un inversor que vende un valor financiero después de mantenerlo menos de un año es gravado sobre las ganancias a una tasa igual a la renta ordinaria. Cualquier valor que se venda después de haberlo mantenido durante más de un año resulta en ganancias de capital a largo plazo, gravadas a una tasa máxima del 20%.

¿Cuál es el beneficio de la reinversión de dividendos?

Los dividendos son ganancias corporativas distribuidas por empresas con un historial de éxito. Estas suelen ser acciones azules o defensivas. Si bien puede ser tentador cobrar los dividendos, reinvertirlos en las empresas que los pagan puede aumentar la cantidad en tu cuenta a largo plazo.

¿Cuáles son los mejores tipos de acciones para mantener a largo plazo?

Al considerar la compra de acciones, elige fondos de índice que rastreen índices específicos, como el S&P 500 o el Russell 1000, y coticen al igual que las acciones. Considera acciones que paguen dividendos y aquellas con alto crecimiento para mejorar tu cartera. Si eres millennial y estás planificando tu jubilación, hay más recursos disponibles para apoyar tu futuro financiero.

De esta manera, invertir a largo plazo en acciones puede ayudarte a navegar las subidas y bajadas del mercado y beneficiarte de tasas impositivas más bajas, además de ser menos costoso en comparación con las operaciones a corto plazo.