La forma en que se gravan las inversiones puede marcar una gran diferencia en los impuestos que se deben pagar, y no todas las acciones se crean iguales en ese aspecto. Con la implementación de la Ley de Reducción de Impuestos y Empleos (TCJA) de 2017, los inversores tienen una gran oportunidad de ahorro en ganancias de capital a largo plazo y dividendos. Una estrategia clave para aprovechar al máximo estos cambios es el uso de lotes fiscales al gestionar las compras y ventas de inversiones y al informar esos ingresos al Servicio de Impuestos Internos (IRS).

¿Qué son los lotes fiscales?

Los valores adquiridos en una sola transacción se denominan “lote” a efectos fiscales. Es decir, un lote fiscal es un registro de todas las transacciones y sus implicaciones fiscales (fechas de compra y venta, precio de coste, precio de venta) que involucran a un valor en particular en una cartera. Pensar en términos de lotes fiscales puede ayudar a un inversor a tomar decisiones estratégicas sobre qué activos vender y cuándo hacerlo, marcando una gran diferencia en los impuestos adeudados sobre esas inversiones.

¿Por qué es importante?

La elección del método de costo base puede tener un efecto significativo en el cálculo de ganancias y pérdidas de capital, e impactar significativamente los impuestos adeudados sobre esas inversiones.

  • La tasa impositiva actual de las ganancias de capital a largo plazo alcanza un 20% para solteros que informan ingresos superiores a $518,900 o más en 2024; para parejas casadas que presentan declaraciones conjuntas, es de $583,750.
  • Las ganancias de capital a corto plazo se gravan como ingresos ordinarios. La Ley estableció siete tramos impositivos que van desde el 10% para los que ganan menos hasta el 37% para los más ricos.

¿Cómo reportar ganancias y pérdidas?

El Formulario 1099-DIV desglosa dividendos ordinarios y calificados para efectos fiscales. Es necesario hacer un seguimiento de la base de coste original de los valores que se compraron para informar las ganancias a corto y largo plazo del año, lo cual se hace en el formulario llamado Anexo D- Ganancias y pérdidas de capital.

¿Cómo usar los lotes fiscales a tu favor?

Tu elección del método de costo base puede tener un efecto significativo en el cálculo de ganancias y pérdidas al vender acciones. Por ejemplo, para las acciones de fondos mutuos, hay tres métodos comunes para identificar la base de coste de las acciones que estás vendiendo: FIFO, el método de costo promedio y el método de acciones específicas.

La estrategia de seguir los valores por lotes fiscales es una excelente manera de minimizar los impuestos sobre tus ganancias. Mantén registros precisos y siempre vende primero tus posiciones de mayor costo.

Otras estrategias para minimizar impuestos

  • Avoid short-term gains
  • Avoid high turnover funds
  • Use tax-managed funds
  • Sell your losers

¿Qué son algunas estrategias fiscales al invertir en acciones que pagan dividendos?

Los inversores en acciones que pagan dividendos pueden minimizar su carga fiscal centrando su atención en los dividendos calificados, que se gravan a tasas más bajas que los ingresos ordinarios. Otra estrategia es invertir en fondos mutuos gestionados fiscalmente que buscan reducir la frecuencia de eventos imponibles, ayudando a los inversores a diferir impuestos sobre ganancias. Además, reinvertir dividendos en lugar de recibirlos en efectivo puede retrasar la responsabilidad fiscal hasta que las inversiones se vendan, lo que potencialmente reduce los impuestos si se venden en un año con un tramo impositivo más bajo.

¿Cómo afectan las reglas de venta ficticia a la cosecha de pérdidas fiscales?

La regla de venta ficticia no permite una deducción fiscal por una pérdida si un inversor compra el mismo valor o uno sustancialmente idéntico dentro de los 30 días antes o después de la venta. Para cumplir con la regla, los inversores deben esperar 31 días antes de recomprar el mismo valor o utilizar una inversión similar pero no idéntica durante ese tiempo. Violar la regla agrega la pérdida no permitida a la base de coste de las acciones recompradas, retrasando el beneficio fiscal hasta que esas acciones se venden eventualmente.

¿Cómo impactan las ganancias de capital a corto y largo plazo en las responsabilidades fiscales?

Las ganancias de capital a corto plazo, o las ganancias de activos detenidos por menos de un año, se gravan como ingresos ordinarios, que puede llegar hasta el 37% para los más ricos. Las ganancias de capital a largo plazo, sin embargo, se gravan a tasas preferenciales, con un tope del 20% para individuos de altos ingresos. Para reducir la responsabilidad fiscal, es beneficioso mantener las inversiones por más de un año para calificar para las tasas a largo plazo. Planificar el momento de las ventas también puede ayudar, ya que cambiar las ventas de activos de alto valor a un año de ingresos más bajos o compensarlas con pérdidas puede reducir significativamente la carga fiscal.

Conclusión

Hay muchas formas de determinar tu ganancia o pérdida en la venta de un valor. Debes elegir el método que funcione mejor para ti y mantenerlo. Aunque el método de primero en entrar, primero en salir puede ser el más fácil de calcular y seguir, no siempre es el más ventajoso.

Si decides aprovechar el método de acciones específicas, asegúrate de recibir una confirmación por escrito de tu corredor o custodio que reconozca tus instrucciones de venta.

Los comentarios, opiniones y análisis expresados en este artículo son solo para fines informativos.