Revisado por Julius Mansa. En la valoración corporativa, al igual que en la contabilidad corporativa, se utilizan numerosas métricas para evaluar el valor de un negocio y su capacidad para generar ganancias y cumplir con sus obligaciones financieras. Una de las formas más simples de evaluar la salud financiera de una empresa es calcular su deuda neta. La deuda neta se calcula sumando todas las deudas a corto y largo plazo de una empresa y restando sus activos corrientes. Esta cifra refleja la capacidad de una empresa para cumplir con todas sus obligaciones utilizando solo aquellos activos que se pueden liquidar fácilmente.

Deudas a corto plazo

Las deudas a corto plazo son aquellas deudas que deben pagarse dentro de un año. Por lo general, estas consisten en elementos como cuentas por pagar y facturas de suministros y costos operativos. Las deudas a largo plazo se pagan durante un período más prolongado, como hipotecas, préstamos y arrendamientos de capital. Los activos corrientes se refieren a la cantidad de dinero que una empresa tiene disponible para pagar deudas. Por lo tanto, los activos corrientes incluyen solo efectivo o equivalentes de efectivo, como acciones, valores comercializables, cuentas por cobrar y otros activos líquidos. Toda la información necesaria para calcular la deuda neta está fácilmente disponible en el balance de una empresa.

La fórmula para la deuda neta es:

Deuda Neta = Deudas a corto plazo + Deudas a largo plazo – Activos corrientes

Para calcular la deuda neta utilizando Microsoft Excel, examine el balance para encontrar la siguiente información: deudas a corto plazo, deudas a largo plazo y activos corrientes. Ingrese estos tres elementos en las celdas A1 a A3. En la celda A4, ingrese la fórmula “=A1+A2-A3” para calcular la deuda neta.

Por ejemplo, suponga que la empresa ABC tiene deudas a corto plazo que consisten en $10,000 en costos operativos y $30,000 en cuentas por pagar. Sus deudas a largo plazo consisten en un préstamo bancario de $100,000 y un arrendamiento para un equipo de $25,000. Sus activos corrientes consisten en $75,000 en efectivo y $150,000 en activos comercializables. El balance muestra los subtotales de estas tres categorías como $40,000, $125,000 y $225,000, respectivamente. Usando Excel, el contador de la empresa determina que la deuda neta es de $40,000 + $125,000 – $225,000, o -$60,000, lo que indica que la empresa tiene más que suficientes fondos para pagar todas sus deudas si todas se vencieran simultáneamente.

Importancia de la deuda neta

La deuda neta ofrece información sobre si la carga de deuda será problemática para los interesados en una empresa. La deuda neta proporciona métricas comparativas que se pueden comparar con otros competidores de la industria. Más deuda no necesariamente significa que esté en peores condiciones financieras que una empresa con menos deuda. De hecho, una gran carga de deuda en el balance de una empresa puede ser incluso menor que la de un competidor.

La deuda neta también revela información sobre la estrategia operativa de una empresa. Si la diferencia entre la deuda neta y la deuda bruta es grande, indica un saldo de efectivo grande, al igual que una deuda significativa. Esto podría indicar preocupaciones de liquidez, oportunidades de inversión de capital o posibilidades de adquisiciones planificadas. Al analizar la deuda neta de una empresa, especialmente en relación con sus competidores, se realiza un examen más detenido de su estrategia.

Desde el punto de vista del valor empresarial, la deuda neta es un factor clave durante una adquisición. La deuda neta es más relevante para un comprador desde el punto de vista de valoración. Un comprador no está interesado en gastar efectivo para adquirir efectivo. Es más relevante para un comprador analizar el valor empresarial, utilizando la deuda de la empresa objetivo neta de sus saldos en efectivo para evaluar correctamente la adquisición.