En la búsqueda de la casa perfecta, es importante no solo tomar en cuenta la propiedad en sí, sino también el tipo de préstamo hipotecario que se ajuste a tus necesidades financieras. Uno de los comparativos comunes es entre las hipotecas convencionales para consumidores comunes y los préstamos VA para miembros militares elegibles, veteranos y cónyuges sobrevivientes. A diferencia de las primeras, los préstamos VA tienden a tener tasas de interés más bajas y costos de cierre reducidos, y es posible que no requieran un pago inicial.

¿Qué es un Préstamo VA?

Los préstamos VA están destinados a veteranos, miembros en servicio activo y ciertos cónyuges sobrevivientes que son elegibles para utilizar un beneficio de préstamo VA. Estos préstamos hipotecarios se pueden utilizar para comprar una casa nueva o existente, e incluso para construir, reparar o adaptar una vivienda para usar como residencia personal.

Los préstamos VA vienen con tasas de interés competitivamente bajas, no requieren pago inicial en algunos casos, y no necesitan seguro hipotecario privado.

A diferencia de los seguros privados, los préstamos VA sí requieren una tarifa de financiamiento de VA como reemplazo. Esta tarifa se paga una vez, al originar el préstamo, y puede variar entre el 1.25% y el 3.3% del precio de compra, dependiendo del pago inicial y la cantidad de veces que se haya utilizado el beneficio del préstamo VA.

¿Qué es un Préstamo Convencional?

Una hipoteca convencional es un tipo de préstamo hipotecario que cualquier persona puede obtener siempre y cuando cumpla con los requisitos de elegibilidad. Estos préstamos pueden ser conformes o no conformes según el monto del préstamo, y ofrecen distintas condiciones de pago.

Las hipotecas convencionales no requieren afiliación militar, tienen tasas de interés competitivas y pueden ser utilizadas para viviendas principales, segundas residencias y propiedades de inversión.

Préstamo VA vs. Préstamo Convencional: Diferencias Clave

Si eres elegible para los préstamos VA pero también estás considerando préstamos hipotecarios convencionales, es importante conocer las diferencias clave, así como los pros y contras de cada tipo de préstamo.

Requisitos de Elegibilidad

  • Los préstamos VA no requieren afiliación militar, pero cuentan con requisitos de elegibilidad más flexibles. A diferencia, las hipotecas convencionales típicamente requieren un puntaje de crédito mínimo de 620 y una relación deuda-ingresos (DTI) no superior al 50%.

Pago Inicial

  • Los préstamos VA no requieren ningún pago inicial, mientras que los préstamos convencionales suelen requerir al menos un 3% de pago inicial.

Seguro Hipotecario Privado (PMI)

  • Las hipotecas convencionales requieren PMI si se realiza un pago inicial inferior al 20%, mientras que los préstamos VA no requieren seguro hipotecario, pero sí una tarifa de financiamiento de VA.

Tasas de Interés

  • Las tasas de interés de los préstamos convencionales y VA suelen ser competitivas, pero en promedio las tasas de los préstamos VA tienden a ser ligeramente más bajas que las de los préstamos convencionales.

Costos de Cierre

  • Los costos de cierre para todos los tipos de préstamos hipotecarios varían según el tipo de préstamo, prestamista, monto del préstamo y otros factores. Sin embargo, los préstamos VA limitan las tarifas de origen al 1% del monto del préstamo, mientras que los préstamos convencionales pueden ser del 0.5% al 1%.

Conclusión

Debido a que los préstamos VA no requieren pago inicial, tienen costos de cierre reducidos, tasas de interés competitivamente bajas y no necesitan seguro hipotecario, suelen ser la mejor opción para aquellos que tienen acceso a un beneficio de préstamo VA. Sin embargo, siempre es recomendable comparar entre los mejores prestamistas hipotecarios y los productos disponibles para elegir el préstamo que mejor se adapte a tu situación financiera.