Si eres un inversionista que ahorra regularmente o con cada cheque de pago, los fondos cotizados en bolsa (ETF, por sus siglas en inglés) son una opción a considerar. Los ETF operan de manera similar a los fondos mutuos indexados. En comparación con los fondos mutuos indexados, los ETF suelen tener costos más bajos, mayor liquidez y un tratamiento fiscal más efectivo.

ETFs vs. Fondos Mutuos

Tanto los ETFs como los fondos mutuos indexados permiten a las personas invertir en muchos sectores. Ambos fondos brindan a los inversionistas exposición al trading de sectores como tecnología, servicios financieros, energía, servicios públicos o bienes de consumo.

Para aquellos que invierten semanal o mensualmente en un plan de jubilación, muchos inversionistas optan por los fondos mutuos para sus cuentas de jubilación 401(k). Sin embargo, los ETFs son otra opción para el 401(k) gracias a su estructura de costos baja, lo que puede beneficiar la cartera de un inversionista.

Tasas de Gastos

Los fondos cobran a sus clientes tarifas basadas en un porcentaje del total de activos bajo administración (AUM, por sus siglas en inglés). Comúnmente conocido como la tasa de gastos, este cargo cubre los gastos generales, como salarios, gastos operativos y de marketing.

Los ETFs tienden a tener una tasa de gastos más baja, ya que sus costos son más bajos por diseño. A lo largo del tiempo, esta diferencia de costo, aunque pequeña, puede sumar una cantidad significativa debido al poder del interés compuesto.

Impuestos

Los fondos indexados, especialmente los administrados de manera activa, generan eventos imponibles para sus inversionistas cuando venden acciones de empresas que poseen y obtienen ganancias, generalmente de manera anual. Los propietarios de los fondos pagan impuestos sobre las ganancias de capital informadas.

Los inversionistas en ETFs no incurren en ganancias de capital hasta que venden acciones en el fondo y son responsables de pagar impuestos si el precio de venta es mayor que su precio de compra. Con los ETFs, los inversionistas pueden controlar cuándo incurren en un evento imponible.

Inversión Mínima

Muchos fondos indexados requieren que los accionistas abran una cuenta con una inversión mínima. Por ejemplo, muchos fondos indexados de Vanguard tienen un mínimo de $3,000. Algunos fondos indexados también requieren que los inversionistas mantengan un nivel de inversión mínimo para evitar una tarifa de mantenimiento.

Los ETFs no tienen un tamaño mínimo de inversión. Lo mínimo que un inversionista debe pagar para comprar un ETF es el precio de una acción del ETF más cualquier comisión y tarifas.

Al comprar o vender ETFs, es recomendable utilizar órdenes límite para tener control sobre los precios de las operaciones. Por otro lado, los fondos indexados tienen un precio al cierre del día, que es el precio que los inversionistas pagarán si deciden comprarlos.

Tarifas y Comisiones

La desventaja principal de los ETFs es el costo de compra y venta de las acciones, ya que se negocian como acciones individuales. Los costos pueden variar según el corredor.

Los fondos indexados pueden no cobrar una tarifa para comprar acciones, incluso en pequeñas cantidades. Sin embargo, el fondo puede cobrar una tarifa de administración anual para vender acciones del fondo indexado. Otros fondos, especialmente aquellos vendidos a través de un corredor, pueden llevar una comisión conocida como carga.

¿Cómo afectan las operaciones sin comisiones a los ETFs?

A medida que más corredores pasan a las operaciones sin comisiones, los ETFs se han vuelto aún más atractivos para realizar inversiones periódicas.

¿Qué son los Activos Bajo Administración?

Los activos bajo administración (AUM) es el valor de mercado total de las inversiones gestionadas por una entidad financiera en nombre de los inversionistas. Los AUM dependen del flujo de dinero de los inversionistas dentro y fuera de un fondo. La SEC requiere que las empresas se registren en la SEC cuando los AUM oscilan entre $25 millones y $110 millones, dependiendo de varios factores, incluido el tamaño y la ubicación de la empresa.

¿Cómo afecta el spread de oferta y demanda a un ETF?

Al comprar o vender cualquier acción o ETF, la diferencia entre el precio de compra y el precio de venta se conoce como el spread de oferta y demanda. Cuanto más amplio sea el spread, más crecimiento debe tener la inversión para superar el precio de compra más alto y el precio de venta más bajo. Los spreads en los ETFs dependen de la liquidez y el volumen de negociación. Los ETFs que se negocian ampliamente tendrán spreads más estrechos, mientras que los que experimentan menos operaciones pueden tener spreads más altos.

Conclusión

Cuando se realizan inversiones periódicas, es valiosa una perspectiva a largo plazo. Los inversionistas en ETFs deben decidir en qué sector o sectores les gustaría tener exposición. Seleccionar el sector adecuado puede marcar una diferencia significativa en el rendimiento de una cartera. En general, los ETFs tienen costos más bajos que los fondos indexados, pero el costo de comprar y vender acciones puede sumar, ya que los inversionistas incurren en un costo de transacción en cada orden de compra o venta.