Planificar la jubilación es un paso importante en la vida financiera de cualquier persona. Requiere no solo dinero, sino también conocer tus metas a largo plazo. Es fundamental preguntarte cuándo te gustaría jubilarte y considerar cuánto dinero necesitarás para mantener tu estilo de vida.

¿Dónde enfocar tu atención durante la jubilación?

Otras consideraciones importantes incluyen si dejarás de trabajar por completo o si planeas complementar tu ingreso de jubilación con un trabajo a tiempo parcial o freelance. Además, los tipos de cuentas que tengas durante la jubilación también jugarán un papel clave en tu planificación. Puedes tener cuentas de interés regular, como una cuenta de ahorros o un certificado de depósito (CD), y también existen cuentas especiales de jubilación, como un 401(k) patrocinado por tu empleador, financiar tu cuenta de jubilación (IRA) por tu cuenta o ambas opciones.

¿Cómo seguir financiando tu IRA después de jubilarte?

Aspectos clave a considerar:

Todo jubilado puede contribuir a IRAs tradicionales si genera ingresos, según la Ley SECURE de 2019. Los jubilados pueden seguir contribuyendo fondos ganados a un Roth IRA indefinidamente.

  • No se pueden hacer contribuciones con ingresos no generados, incluyendo dinero de ganancias de capital, dividendos o intereses de inversión.
  • No puedes contribuir con una cantidad que supere tus ganancias y solo puedes contribuir hasta los límites de contribución anuales establecidos por el IRS.
  • Las personas con IRAs tradicionales deben comenzar a tomar distribuciones mínimas requeridas cuando alcancen los 73 años, a partir de 2023 (aumentado de 72 años en años anteriores). El 1 de enero de 2033, la edad aumenta a 75 años.

Financiando una Cuenta Individual de Jubilación (IRA)

La posibilidad de seguir financiando una IRA depende de si tienes algún ingreso generado después de jubilarte. Esto incluye salarios, consejos, bonificaciones, comisiones, ganancias del autoempleo, pagos por discapacidad a largo plazo y beneficios de huelgas sindicales. Es importante tener en cuenta que no puedes contribuir con dinero de otras fuentes, como ganancias de capital, dividendos o intereses de inversión.

Tipos generales de IRAs:

  • IRA Tradicional: Permite financiar tu cuenta con dólares antes de impuestos, lo que reduce tu ingreso anual y tu responsabilidad fiscal anual. Las inversiones en tu cuenta pueden crecer de forma diferida en impuestos y no se gravan hasta que comiences a recibir distribuciones.
  • Roth IRA: Las retiradas de esta cuenta son libres de impuestos, pero las contribuciones se realizan con dólares después de impuestos.

¿Por qué continúas aportando a una IRA tradicional?

Continuar contribuyendo a una IRA tradicional es posible incluso si estás oficialmente jubilado pero sigues trabajando, recibiendo compensación y pudiendo documentarla o reportarla en tu declaración de impuestos. Es importante recordar que los ingresos ganados no incluyen ciertas formas de compensación, como las de una pensión, una renta vitalicia o Seguro Social. Tampoco incluyen ingresos de inversiones o ganancias generadas por activos. Esto significa que el dinero que contribuyes debe proceder del trabajo por el que te pagan.

Conclusión importante:

Bajo los términos de la Ley SECURE de 2019, todos los jubilados ahora pueden contribuir a IRAs tradicionales si generan ingresos.

  • Todas las personas, sin importar la edad o la situación laboral, nunca deben exceder los límites de contribución anuales establecidos por el IRS para ambas IRAs.
  • Para 2024, el límite es de $7,000, o $8,000 si tienes 50 años o más.

Financiando un Roth IRA

Un Roth IRA ofrece mucha más flexibilidad que una IRA tradicional. Puedes continuar contribuyendo a tu Roth IRA sin importar tu edad, siempre y cuando generes ingresos, ya sea que recibas un salario como empleado o ingresos 1099 por trabajos como autónomo. Por el contrario, nunca necesitas hacer distribuciones de la cuenta.

Recuerda:

Los depósitos deben realizarse con ingresos generados; por lo tanto, no puedes contribuir más de lo que has ganado ese año.

  • Tu ingreso bruto ajustado modificado (MAGI) no puede exceder los límites de ingresos anuales que determinan si puedes contribuir a un Roth IRA.

Ventajas y Desventajas de Financiar una IRA Durante la Jubilación

Contribuir a una IRA durante la jubilación tiene beneficios y desventajas, y no hay una regla estricta sobre si es una buena idea. Todo depende de tu situación financiera, por lo que debes decidir si contribuir a tu cuenta después de jubilarte es la mejor opción para ti.

Ventajas:

  • Incrementas tu ahorro para la jubilación, lo que puede permitirte acumular una cantidad decente de dinero y generar más intereses a largo plazo.
  • Si eres disciplinado, ahorrar más puede ayudarte a gastar menos durante la jubilación y recortar otros gastos.

Desventajas:

  • La principal desventaja es la asequibilidad, ya que probablemente tengas ingresos fijos y limitados, lo que puede afectar tu presupuesto mensual.
  • Contribuir también puede reducir tu fondo de emergencia al bloquear tu dinero durante un tiempo determinado.

¿Puedes Abrir una Nueva IRA Si Estás Jubilado?

No hay límite de edad para abrir una IRA, lo que significa que puedes hacerlo incluso después de jubilarte. Recuerda que las contribuciones solo pueden provenir de ingresos generados y debes cumplir con los límites de contribución para evitar una multa del IRS.

¿Puedes Continuar Financiando una IRA Si Estás Jubilado?

Puedes contribuir y seguir financiando una IRA después de la jubilación, ya sea Roth o tradicional. Si financias tu IRA después de jubilarte, recuerda mantener en mente los límites máximos de contribución para evitar penalidades.

¿Puedes Contribuir a un Roth IRA Después de la Jubilación?

Sí, puedes contribuir a un Roth IRA después de jubilarte siempre que no excedas los límites máximos de contribución anuales y solo utilices ingresos generados.

Conclusión

La planificación de la jubilación es fundamental para garantizar tu futuro financiero. Aunque ya estés jubilado y no tengas ingresos laborales, aún puedes contribuir a tu IRA si tu pareja continúa trabajando y generando ingresos. Consulta a un asesor financiero para obtener orientación personalizada sobre tu situación específica.