La planificación financiera puede ser desafiante para todos, pero especialmente para las familias afectadas por discapacidades. Navegar por los diferentes beneficios, cuentas y facturas puede resultar abrumador. Es importante tener en cuenta que muchos tipos de discapacidades están asociados con costos elevados que las familias a menudo luchan por cubrir.

¿Qué beneficios y programas están disponibles?

En Estados Unidos, existen alrededor de nueve millones de familias que cuidan de un niño con discapacidad. Muchas de estas familias enfrentan dificultades financieras significativas. Por ejemplo, el costo promedio del autismo es de $60,000 al año durante la infancia, y se espera que los servicios para adultos superen los $461 mil millones para el 2025. A su vez, según la investigación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU., el costo de por vida promedio para un individuo con parálisis cerebral puede superar los $1.6 millones una vez ajustado por inflación.

En esta guía, abordaremos los cuatro temas financieros que probablemente tendrán más impacto si tu familia se ve afectada por una discapacidad: garantizar que recibas el nivel correcto de beneficios, cuentas ABLE (para lograr una mejor experiencia de vida), fideicomisos de necesidades complementarias y exenciones de Medicaid.

¿Por qué es importante recibir los beneficios adecuados?

Juliana Crist, consultora senior de AKF Consulting, destaca tres programas de beneficios que son particularmente importantes para las familias que cuidan de un niño con discapacidad: el Ingreso de Seguridad Suplementario (SSI), el Seguro por Incapacidad del Seguro Social (SSDI) y Medicaid. El SSI proporciona pagos mensuales a personas con ingresos y recursos limitados, y los niños menores de 18 años pueden calificar si tienen una condición médica que cumple la definición de discapacidad de la Administración del Seguro Social (SSA).

Cuando un niño con discapacidades alcanza los 18 años, se le considera un adulto y la elegibilidad para los beneficios por discapacidad de la familia cambiará.

¿Qué son las cuentas ABLE y cómo pueden ayudar?

Las cuentas ABLE fueron creadas en el 2014 para permitir a las personas con discapacidad ahorrar dinero sin perder la elegibilidad para programas como el SSI y Medicaid. En estas cuentas, los fondos crecen libres de impuestos y tienen un límite de contribución anual de $18,000. Las personas con discapacidad también pueden trabajar y contribuir más allá de ese límite anual gracias al Acta de Recortes de Impuestos y Empleos de 2017.

Es importante tener en cuenta que no todos los estados tienen programas ABLE, por lo que es crucial elegir la cuenta que mejor se adapte a tus necesidades. Considera factores como los beneficios fiscales, facilidad de uso, opciones de inversión y funcionalidad de la tarjeta de débito.

¿Qué son los fideicomisos de necesidades complementarias?

Los fideicomisos de necesidades complementarias permiten ahorrar dinero para una persona con discapacidad sin afectar su elegibilidad para beneficios públicos. Aunque son más costosos de establecer y administrar que las cuentas ABLE, no tienen límites de financiamiento. Los fondos de estos fideicomisos se utilizan para gastos específicos como servicios médicos, cuidadores y transporte.

¿Qué son las exenciones de Medicaid y cómo funcionan?

Las exenciones de Medicaid permiten a los estados brindar atención en la comunidad a personas con discapacidad en lugar de institucionalizarlas. Los beneficiarios pueden recibir una amplia gama de servicios médicos y no médicos según sus necesidades individuales y pautas estatales.

Una exención clave es la de Servicios en el Hogar y la Comunidad (HCBS), diseñada para brindar atención personalizada a quienes la necesitan. Además, el Programa de Exención Katie Beckett ofrece un nivel de cuidado institucional en el hogar a menores de 19 años con condiciones graves, con la cobertura de servicios médicos esenciales.

La planificación financiera para familias afectadas por discapacidades puede ser compleja, pero entender y aprovechar estos programas y beneficios puede marcar la diferencia en la calidad de vida de tus seres queridos con discapacidad.