Padres: Este es tu peor hábito financiero

¿Qué es lo que pasa?

Ric Edelman, autor y cofundador de Edelman Financial Services, comparte el peor hábito financiero que ve que los padres transmiten a sus hijos.

¿Dónde sucede?

Según Edelman, las discusiones sobre dinero y el manejo de las finanzas son algunas de las principales fuentes de conflictos en las relaciones de pareja.

¿Cómo sucede?

De acuerdo a la mayoría de las encuestas sobre el tema, los desacuerdos relacionados con el dinero tienen el “honroso” primer lugar como la principal fuente de conflictos entre personas casadas. Estos problemas financieros pueden ser una razón importante por la cual los matrimonios se desmoronan.

¿Por qué es importante?

Dinero y sexo consistentemente se sitúan como las dos principales razones por las que las parejas pelean. En ambos casos, un miembro de la pareja parece no poder obtener suficiente de lo que perciben como una mercancía escasa.

  • Desacuerdos sobre el dinero, o la falta de conversaciones abiertas y constructivas al respecto, son una de las principales razones de peleas en las relaciones.
  • Para evitar conflictos, las parejas deben establecer reglas y un presupuesto sobre cómo se debe gastar e invertir el dinero.
  • La honestidad es la mejor política, ya que ayuda a evitar el resentimiento.
  • Evita discutir si no se puede llegar a un punto medio y busca la ayuda de un consejero o mediador.
  • El trabajo en equipo es fundamental en las finanzas de una pareja: establezcan metas juntos y eviten los gastos que no se ajusten a esas metas.

Los hechos

Administrar tus finanzas puede ser una tarea ardua. Al igual que con todas las tareas que las parejas necesitan completar, la división del trabajo rara vez es equitativa. Cuando se trata del dinero, uno de los cónyuges puede estar más interesado en gestionarlo, mientras que el otro está más interesado en gastarlo. A veces, uno de los cónyuges ni siquiera querrá hablar o pensar en el tema.

El cónyuge menos interesado a menudo ve el dinero como un medio de control y puede creer que la persona que lleva las riendas de la cartera tiene derecho a tomar las decisiones. Mientras que la persona que administra el dinero a menudo ve el ahorro en lugar de gasto simplemente como la forma correcta de mantenerse fuera de deudas, y nunca lo piensa en términos de control. Debido a estas diferencias en las perspectivas sobre el dinero, a veces es mejor buscar un punto en común antes de discutir exactamente cómo se gastará el sueldo de esta semana.

Las reglas

Para que el dinero no se convierta en un obstáculo en tu relación, debes establecer reglas sobre cómo manejar el tema en tu hogar. Estas reglas deben establecerse antes de entrar en un conflicto relacionado con el gasto. En medio de una discusión no es el mejor momento para intentar llegar a un consenso.

Importante

Aquí tienes dos reglas básicas para interactuar con tu pareja al tomar decisiones de gasto: no lo escondas y no mientas al respecto.

Las relaciones basadas en la verdad son mucho más fuertes que aquellas basadas en el engaño.

Una vez que ambos hayan acordado ser honestos, necesitas una forma de romper el empate al momento de tomar decisiones. La mejor elección en este caso es que el consenso prevalezca. Por supuesto, si no logran encontrar un terreno común en una decisión particular, deben acordar de antemano que la prudencia tiene prioridad. Al tener la prudencia como guía, será más probable que elijas ahorrar en lugar de gastar cuando no puedan ponerse de acuerdo en que gastar es una buena idea. Establecer un presupuesto puede ser una excelente manera de desarrollar una visión mutuamente acordada sobre tus hábitos de gasto y ahorro.

Si estableces reglas pero aún no pueden llegar a un acuerdo, consideren la terapia. Discutir a menudo es poco productivo; darse por vencidos rara vez logra mucho. A veces, un moderador imparcial puede ayudar a las parejas frustradas a ver las cosas de la misma manera. La clave es mantenerse involucrado en el proceso mientras desarrollan hábitos de gasto con los que estén contentos como pareja e individualmente.

Si detestas tanto ocuparte del dinero que delegas voluntariamente toda la responsabilidad de las decisiones relacionadas con el gasto, debes estar dispuesto a vivir con las consecuencias de tal enfoque. No es justo para tu pareja si no ayudas y no te involucras, pero aún te quejas.

Trabajo en equipo

Tomar decisiones sobre el dinero es parte de construir una vida juntos. El proceso de construcción debe ser constructivo, por lo que necesitas trabajar de la mano, no en oposición. Establezcan metas juntos y gasten su dinero de maneras que los acerquen a lograr esas metas. Si un gasto en particular no los lleva hacia sus objetivos, eviten hacerlo. No permitan que el consumo ostentoso los desvíe. Si trabajan juntos como equipo en lugar de pelear por dinero, es posible que les quede suficiente tiempo y energía para esforzarse en obtener ese otro recurso escaso que han estado buscando.