En la sociedad actual, nos encontramos rodeados de productos que parecen diseñados para ser desechados rápidamente. Desde las cámaras desechables hasta los pañales desechables, pocos artículos destinados a los consumidores están hechos para perdurar en el tiempo. Sin embargo, lo que muchos consumidores no se dan cuenta es que este mundo desechable fue en gran parte creado por diseño. Los fabricantes lo llaman “obsolescencia programada”.

Impacto de la Obsolescencia Programada

Descubre cómo esta tendencia afecta no solo a tu bolsillo, sino también al medio ambiente.

¿Qué Significa la Obsolescencia Programada?

La obsolescencia programada describe una estrategia en la que se garantiza que la versión actual de un producto dado se volverá obsoleta o inútil en un período de tiempo conocido. Este movimiento proactivo garantiza que los consumidores buscarán reemplazos en el futuro, lo que aumenta la demanda.

¿Es una Estrategia de Negocio Viable?

Sí, definitivamente. La creación de productos que no están destinados a durar significa que los consumidores necesitarán comprar productos de reemplazo.

Impacto en el Bolsillo y en el Medio Ambiente

El uso de materiales desechables no solo garantiza la recompra del mismo artículo y un beneficio para el fabricante, sino que también termina siendo una ganancia pura para ellos. El estilo de vida de abundancia tiene grandes costos tanto para tu bolsillo como para el medio ambiente. Comprar bienes duraderos, reciclar productos y vivir de forma sostenible son algunas medidas que puedes tomar para combatir este estilo de vida.

No Diseñados para Durar

Crear productos que no están pensados para durar es una estrategia comercial muy viable, ya que esto significa que los consumidores necesitarán comprar productos de reemplazo. Por ejemplo, considera la navaja recta que usaba tu bisabuelo o los pañales de tela que probablemente hacía tu bisabuela para sus hijos. Si puedes encontrarla y afilarla, esa navaja aún se puede seguir utilizando hoy en día, y esos pañales probablemente se usaron para varios niños y luego se reutilizaron para limpiar derrames de leche o fregar pisos. En años más recientes, esos productos duraderos se han convertido en malas noticias para las empresas que necesitan vender más productos este año que el año pasado para mantener altas sus cotizaciones bursátiles.

¡Comienza Hoy!

Ignora la seductora canción del gasto desenfrenado. Olvídate de tener las últimas tendencias, las casas más grandes o los autos más llamativos. En cambio, haz de tu situación financiera tu máxima prioridad. Tu bolsillo respirará aliviado cuando hagas el esfuerzo, y tal vez puedas reducir tu impacto en el medio ambiente en el proceso.