Las agencias calificadoras de crédito utilizan letras para denotar la solvencia crediticia de empresas y países que emiten valores de deuda, como bonos corporativos y gubernamentales. Las agencias más seguidas son Standard & Poor’s (S&P), Fitch y Moody’s. Invertirores prestan especial atención a sus calificaciones, que van desde A hasta D con signos más y menos aplicados a cada una para indicar la probabilidad de que un prestatario repague su deuda. Las calificaciones más altas vienen con letras triples. Las calificaciones que llevan un signo más son mejores que aquellas con un signo menos.

¿Qué Sucedió con las Calificaciones de Crédito en Estados Unidos?

Profesionales de finanzas se mantenían atentos después de que S&P anunciara en agosto de 2011 que estaba bajando la calificación de crédito de EE. UU. de AAA a AA+. Luego, Fitch siguió el ejemplo el 1 de agosto de 2023, también bajando la calificación de EE. UU. de AAA a AA+. Esta noticia envió ondas de choque a través del mundo en 2011 y las vibraciones se sintieron aún más la semana siguiente cuando el mercado cayó más del 6% al final del día.

Cada año, numerosos países ven sus calificaciones de crédito bien rebajadas o aumentadas. Ejemplos del 2024 incluyen a Israel y Francia. En mayo de 2024, S&P rebajó la calificación de crédito de Francia por primera vez desde 2013 de AA a AA- debido a preocupaciones sobre el déficit presupuestario del país. Unos meses después, en octubre, S&P rebajó la calificación de Israel de A+ a A debido a preocupaciones de que conflictos podrían desestabilizar la economía y finanzas públicas del país.

¿Por Qué son Importantes Estas Calificaciones de Crédito?

Las calificaciones AAA y AA+ otorgadas por S&P y Fitch indican un bajo riesgo crediticio y una sólida capacidad de pago de la deuda de los emisores. Estas calificaciones influencian directamente la confianza de los inversores y el rendimiento de los mercados financieros.

¿Qué Significan las Calificaciones de S&P y Fitch?

S&P y Fitch califican la deuda de países y empresas basándose en letras que van desde A hasta D. Una calificación de AAA es la máxima calificación de crédito posible, mientras que una calificación D es la más baja. También existen subcategorías con símbolos + y -. Por ejemplo, AA+, AA, y AA-. Las agencias consideran varios factores al asignar las calificaciones, como el historial de pagos, deudas actuales, flujos de efectivo e ingresos actuales, perspectivas del mercado y economía en general, entre otros.

¿Qué Significa AAA?

La calificación AAA de S&P y Fitch es la más alta que se puede asignar a cualquier emisor de deuda. Es equivalente a la calificación Aaa emitida por Moody’s. Esta calificación se asigna a deudas de grado de inversión con un alto nivel de solvencia crediticia y una capacidad fuerte para pagar a los inversores.

Por otro lado, la calificación AA+ es otorgada por S&P y Fitch y es similar a la calificación Aa1 de Moody’s. Esta calificación, la segunda más alta, sigue siendo de alta calidad pero está por debajo del rango AAA. S&P dice que AA+ difiere de AAA “sólo ligeramente” e indica que la capacidad del emisor para pagar su deuda es “muy fuerte”. Fitch hace comentarios similares, añadiendo que la probabilidad de incumplimiento con AA+ es “muy baja”.

¿Todavía Tiene EE. UU. una Calificación de Crédito AAA?

Sí, al menos desde la perspectiva de DBRS y Moody’s. DBRS tiene a EE. UU. calificado con AAA con una perspectiva estable y la calificación de Moody’s para EE. UU. es Aaa con una perspectiva negativa.

La calificación de EE. UU. varía según la agencia calificadora. Moody’s ha asignado al país una calificación Aaa, que es la más alta. S&P y Fitch, por otro lado, han asignado a EE. UU. una calificación AA, que es su segunda calificación más alta.

La calificación de crédito de EE. UU. fue rebajada de AAA a AA+ en agosto de 2011 por S&P y en agosto de 2023 por Fitch. Ambas agencias citaron la previsibilidad decreciente de la formulación de políticas y la formulación de políticas de último minuto.

Conclusión

La calificación AAA asignada por S&P y Fitch es la calificación crediticia más alta, seguida por AA+. Ambas calificaciones indican que la entidad puede ser confiable para pagar sus deudas y tiene un bajo riesgo de incumplimiento.