Revisado por Michael J Boyle   Revisado por Yarilet Perez . La polí­tica fiscal se refiere al uso del presupuesto gubernamental para afectar la economí­a. Esto incluye el gasto gubernamental y los impuestos recaudados. Se dice que la polí­tica es expansiva cuando el gobierno gasta más en partidas presupuestarias como infraestructura o cuando se reducen los impuestos. Tales polí­ticas se utilizan tí­picamente para impulsar la productividad y la economí­a. Por otro lado, la polí­tica es contractiva cuando el gasto gubernamental disminuye o los impuestos aumentan. Las polí­ticas contractivas podrí­an usarse para combatir la inflación en aumento. En general, la polí­tica expansiva conduce a mayores déficits presupuestarios, mientras que la polí­tica contractiva reduce los déficits.

¿Qué es la Polí­tica Fiscal y por qué es importante?

Los gobiernos utilizan la polí­tica fiscal, como el gasto gubernamental y los impuestos recaudados, para estimular cambios económicos. La polí­tica expansiva se caracteriza por un aumento del gasto gubernamental o impuestos más bajos para impulsar la productividad. La polí­tica contractiva se caracteriza por una disminución del gasto gubernamental o impuestos más altos para combatir la inflación en aumento. La polí­tica expansiva conduce a mayores déficits presupuestarios, y la polí­tica contractiva reduce los déficits.

Keynesian Macroeconomics y el Rol de la Polí­tica Fiscal

La contabilidad de los presupuestos gubernamentales es similar a la de un presupuesto personal o domestico. Un gobierno tiene un superávit cuando gasta menos dinero del que gana a través de impuestos, y tiene un déficit cuando gasta más de lo que recibe en impuestos. Hasta principios del siglo XX, la mayorí­a de los economistas y asesores gubernamentales favorecí­an presupuestos equilibrados o superávits presupuestarios. La revolución keynesiana y el auge de la macroeconomí­a impulsada por la demanda hicieron polí­ticamente factible para los gobiernos gastar más de lo que recaudaban. Los gobiernos podí­an pedir prestado dinero e incrementar el gasto como parte de una polí­tica fiscal dirigida.

Importancia de la Polí­tica Fiscal

La macroeconomí­a keynesiana enfatiza el rol de la intervención gubernamental en la estabilización de las economí­as. Sugiere que durante perí­odos de recesión económica, los gobiernos deben aumentar el gasto público y generar déficits presupuestarios para estimular la demanda, impulsar el empleo y contrarrestar las recesiones. Este enfoque argumenta que un aumento del gasto gubernamental llevará a un aumento del gasto de consumo y empresarial, creando un ciclo de actividad económica.

  • Un gobierno pueda desplegar políticas expansivas y contractivas al mismo tiempo, especialmente si se esfuerza por mantener la posición actual de un paí­s. Por ejemplo, puede revelar nuevos impuestos mientras aumenta el gasto gubernamental.

Polí­tica Fiscal Expansiva y su Implementación

Los gobiernos pueden gastar más allá de las restricciones presupuestarias basadas en impuestos al pedir prestado dinero del sector privado. Por ejemplo, el gobierno de EE. UU emite Bonos del Tesoro para recaudar fondos. Para cumplir con sus obligaciones futuras como deudor, el gobierno eventualmente debe aumentar los ingresos fiscales, reducir el gasto, pedir prestado fondos adicionales o imprimir más dólares. No todos los economistas están de acuerdo sobre el efecto neto de la polí­tica fiscal expansiva en el presupuesto a largo plazo. A corto plazo, los superávits se reducirán o los déficits aumentarán.

Impacto de la Polí­tica Fiscal en el Empleo y la Inflación

La polí­tica fiscal puede impactar el desempleo y la inflación al influir en la demanda agregada. Las polí­ticas fiscales expansivas a menudo reducen el desempleo al aumentar la demanda de bienes y servicios, mientras que la polí­tica fiscal contractiva puede ayudar a controlar la inflación al reducir la demanda.

Efecto Multiplicador y la Economí­a

Un concepto crucial en economí­a, especialmente en el contexto de la polí­tica fiscal, es el efecto multiplicador. Se refiere al impacto amplificado que un cambio en el gasto gubernamental, la tributación o la inversión tiene en la actividad económica general. El efecto opera a través de una serie de flujos de gasto e ingresos interconectados como el gasto inicial, los ingresos empresariales aumentados, los ingresos adicionales para los trabajadores, el gasto del consumidor aumentado y los ingresos empresariales y el empleo.

Futuro de la Polí­tica Fiscal y su Importancia

Mientras que la polí­tica fiscal se usa a menudo para abordar desafíos económicos a corto plazo, también puede usarse para abordar problemas estructurales a largo plazo. Por ejemplo, el gasto gubernamental dirigido a educación, infraestructura e investigación puede contribuir al crecimiento económico a largo plazo y la competitividad. La administración cuidadosa es necesaria para garantizar la sostenibilidad de los déficits a largo plazo..

Conclusión

La polí­tica fiscal se refiere al uso del gasto y los impuestos por parte del gobierno para influir en la economí­a de una nación. Su objetivo es estabilizar el crecimiento económico, el empleo y la inflación. La polí­tica fiscal expansiva implica un aumento del gasto o recortes impositivos para estimular la demanda y contrarrestar las recesiones, lo que puede llevar a déficits presupuestarios. La polí­tica fiscal contractiva implica un gasto reducido o impuestos más altos para controlar la inflación, lo que posiblemente lleve a superávits presupuestarios.