Como asesor financiero personal con certificación CFA de tercer nivel, es importante que los inversionistas interpreten la información sobre cuentas por cobrar en el balance de una empresa como el dinero que la compañía tiene una razonable seguridad de que será pagado por sus clientes en una fecha definida en el futuro. Sin embargo, no hay una garantía firme de que la empresa recibirá el dinero que se le debe.

¿Qué son las cuentas por cobrar?

En el balance de una empresa, la línea de cuentas por cobrar representa el dinero que la empresa le deben sus clientes por bienes o servicios prestados. Este dinero se clasifica como ingresos para la empresa en el momento en que se realiza una venta, en lugar de cuando se recibe el efectivo. Posteriormente, una vez que la empresa recibe el pago, se reclasificará el efectivo en su balance sumando el cuenta de efectivo y acreditando la cuenta de cuentas por cobrar.

¿Por qué es importante?

Las cuentas por cobrar, al igual que el efectivo, se consideran activos corrientes. Es importante para los inversionistas examinar de cerca las cuentas por cobrar de una empresa en su balance. A pesar de que las cuentas por cobrar son un activo, no significa que altos niveles de ellas deban considerarse uniformemente buenos.

Un ejemplo práctico

Supongamos que la Compañía XYZ acuerda vender $500,000 de sus productos al cliente ABC con términos netos de 90 días, lo que significa que el cliente tiene 90 días para pagar. En el punto de venta, la Compañía XYZ registra los $500,000 como una cuenta por cobrar mediante un pago a su cuenta de cuentas por cobrar. Se registra también un crédito de $500,000 en la cuenta de ingresos. Cuando el cliente pague, con suerte dentro de los 90 días asignados, la Compañía XYZ reclasificará los $500,000 como efectivo en su balance. Se debitará la cuenta de efectivo y se acreditará la cuenta de cuentas por cobrar.

Niveles de cuentas por cobrar dignos de inversión

Para determinar si una empresa es una inversión digna, es crucial examinar sus niveles de cuentas por cobrar en relación con su efectivo disponible. Los altos niveles de cuentas por cobrar en relación con el efectivo a menudo indican prácticas laxas en la empresa para cobrar sus deudas. Por otro lado, niveles bajos de cuentas por cobrar también pueden ser motivo de preocupación, ya que a veces esto significa que el departamento de finanzas de la empresa no es competitivo con sus términos de financiamiento.

En resumen, para los inversionistas interesados en las cuentas por cobrar de una empresa, es esencial realizar una investigación exhaustiva y considerar factores como la rotación de cuentas por cobrar, el nivel de reservas para cuentas dudosas y la relación entre cuentas por cobrar y efectivo disponible antes de tomar decisiones de inversión.