Imagínate despertar en un mundo donde el dólar estadounidense (USD), el pilar de las finanzas globales, ha colapsado. Este escenario puede parecer muy improbable, pero es una narrativa que a menudo se encuentra en plataformas dudosas que promueven el oro, las criptomonedas y puntos de vista políticos extremistas, y ocasionalmente se insinúa en el discurso mainstream. El dólar siempre ha tenido enemigos externos durante el largo periodo de su dominio, desde el bloque comunista y los anticolonialistas hasta adversarios contemporáneos como China, Rusia y otras potencias emergentes. Mientras tanto, los críticos argumentan que la inflación creciente, el aumento del déficit federal de EE. UU. y los programas de ayuda gubernamental podrían poner en peligro la dominancia del USD desde dentro.

¿Por qué las monedas colapsan?

Un colapso de una moneda es una disminución severa y repentina en el valor de la moneda de una nación, lo que conduce a la inestabilidad económica, la angustia financiera y a menudo a la agitación política. Este fenómeno incluye una inflación disparada, precios enormemente incrementados para las importaciones y un movimiento masivo de inversores fuera de la moneda, si no del país de origen en sí. En términos simples, un colapso de una moneda significa que el dinero que la gente usa a diario pierde rápidamente su valor, lo que dificulta la compra de bienes y servicios, la devolución de deudas y el mantenimiento de la estabilidad económica.

Argentina, Hungría, Chile, Angola, Zimbabue y Alemania han experimentado crisis monetarias horribles desde 1900. La raíz de cualquier colapso radica en la falta de confianza en la estabilidad o utilidad del dinero para servir como una efectiva reserva de valor o medio de intercambio. Una vez que los usuarios dejan de creer que una moneda es útil, esa moneda está en problemas.

Historia de los colapsos de monedas

La historia está llena de colapsos de monedas. Parafraseando la línea de Ernest Hemingway en “Fiesta” sobre la bancarrota, tales catástrofes ocurren “gradualmente, y luego repentinamente”. Los eventos se desarrollan lentamente, pero el colapso en sí mismo será rápido cuando todos corren hacia las salidas.

Tipos de crisis de monedas

Para empezar, podemos basarnos en un artículo ahora clásico de Graciela Kaminsky tras las principales crisis de monedas en México y Asia en los años 90, que proporciona las categorías a menudo utilizadas por los economistas para definir lo que es un colapso de moneda. Aquí están los tipos de crises:

  1. Crisis con problemas de cuenta corriente: Estas crisis se caracterizan por una pérdida de competitividad, a menudo debido a apreciaciones reales del tipo de cambio. Esto puede ocurrir debido a diversos factores, incluyendo la sobrevaloración de la moneda, el aumento de los costos de producción o políticas comerciales que perjudican a los productores nacionales.
  2. Crisis por excesos financieros: Estas surgen de los auge en los mercados financieros, caracterizado por un crecimiento previo e insostenible en el crédito doméstico.
  3. Crisis de problemas de deuda soberana: Están vinculadas a niveles de deuda extranjera “insostenibles”.
  4. Crisis con déficits fiscales: Resultan de políticas fiscales expansivas.
  5. Crisis de paradas repentinas: Ocurren debido a cambios bruscos en los flujos de capital, típicamente desencadenados por aumentos abruptos en las tasas de interés globales.
  6. Crisis autoinducidas: Ocurren sin vulnerabilidades domésticas o externas aparentes.

¿Cómo podría ocurrir un colapso del dólar estadounidense?

Ahora que sabemos cómo una moneda podría caer, imaginemos un escenario no muy lejano de los representados en las escenas iniciales de películas postapocalípticas. El colapso del dólar requeriría la convergencia de eventos improbables que desgarrarían gran parte de la sociedad. El escenario es heurístico, no predictivo.

Evento desencadenante: Una combinación de tensiones geopolíticas crecientes y un importante ciberataque a las instituciones financieras de EE. UU. interrumpen severamente los mercados globales.

Pérdida de confianza: Los inversionistas entran en pánico, vendiendo rápidamente los bonos del Tesoro de EE. UU. y otros activos denominados en dólares, lo que desencadena una fuerte caída en el valor del dólar.

Es necesario estar preparado y entender las posibles razones por las que una moneda puede colapsar, así como los eventos históricos y vulnerabilidades contemporáneas que podrían llevar a dicha crisis. Mantén un ojo en los movimientos económicos y políticos globales que podrían impactar la estabilidad de la moneda y toma medidas preventivas para proteger tus activos en caso de una eventualidad.

Conclusión

La viabilidad comercial del dólar estadounidense es incuestionable. El dólar se utiliza globalmente en las transacciones mundiales, la mayoría de los intercambios de petróleo se realizan en dólares estadounidenses, y el país en sí es la economía más grande del mundo y una nación políticamente y económicamente estable. Aunque algunos países buscan reducir su dependencia del dólar, sigue siendo esencial para los negocios globales y es una moneda de reserva ampliamente mantenida. No hay razón para esperar que el dólar estadounidense colapse en un futuro cercano. Tal cambio requeriría que todo el mundo cambie su adhesión a un sistema monetario internacional que tiene al dólar en su centro. Hasta ahora, no hay ningún reemplazo a la vista.