En el hemisferio norte, cuando el invierno se presenta, millones de hogares se preparan para facturas de energía elevadas, con los gobiernos haciendo lo posible para evitar aumentos significativos en el precio del calor para sus poblaciones. Durante mucho tiempo, los precios del petróleo y del gas natural han estado correlacionados: tendían a subir y bajar juntos. Sin embargo, con suficiente frecuencia en años recientes, cuando los precios del petróleo aumentan, los precios del gas natural permanecen sorprendentemente bajos. Esto deja a consumidores e inversores preguntándose: ¿los precios del petróleo y el gas natural aún suben y bajan juntos?

La Importancia de la Relación entre Petróleo y Gas Natural

Ambas materias primas desempeñan roles cruciales en la economía, desde el combustible para el transporte hasta la calefacción de hogares y la generación de electricidad. Pero ha habido cambios tecnológicos importantes en las últimas décadas: la mayoría de los propietarios de viviendas difícilmente pueden permitirse cambiar sus sistemas de calefacción cuando el precio de un combustible se dispara.

A continuación, examinaremos la correlación histórica entre estos dos importantes productos básicos antes de abordar sus precios en años recientes y lo que nos dicen sobre la relación que aún podrían tener entre sí.

Comparaciones de Precios en los Últimos Años

Las comparaciones de gráficos de petróleo crudo y gas natural en años recientes muestran una correlación mínima. Los datos de la Administración de Información de Energía de EE. UU. (EIA) muestran una fuerte correlación en períodos anteriores. La producción de esquisto en EE. UU. ha sido una de las razones para la desconexión de los precios del petróleo crudo y del gas natural, ya que el gas natural es un producto regional. Los períodos de mayor correlación entre los dos productos básicos surgen porque el petróleo y el gas natural pueden ser sustitutos el uno del otro.

Las observaciones de precios históricos para ambos activos establecen el contexto. Los gráficos de los precios del petróleo Brent, que es un tipo de petróleo que sirve como referencia para los precios mundiales del petróleo, y el gas natural, respectivamente, muestran que entre junio de 2017 y mayo de 2018, el precio del petróleo crudo subía mientras que los precios del gas natural se mantenían relativamente estables. Los precios de ambos activos cayeron bruscamente en el cuarto trimestre de 2018, aunque la caída en el precio del petróleo crudo comenzó a principios de octubre, mientras que los precios del gas natural no comenzaron a caer hasta diciembre.

La Revolución del Esquisto

La revolución del esquisto ha desempeñado un papel significativo en la desconexión de los precios del petróleo crudo y del gas natural en EE. UU. La adopción generalizada de técnicas de fracturación hidráulica y perforación horizontal ha llevado a un aumento en la producción de esquisto de petróleo y gas. Esta mayor oferta ha ayudado a reducir y estabilizar los precios del gas natural, lo que los hace menos dependientes de los movimientos de precios del petróleo.

La evidencia muestra que los precios del petróleo crudo y del gas natural se han vuelto menos correlacionados con el tiempo, o que los precios se han “desacoplado”. La EIA proporciona datos históricos para un estudio de correlación entre el petróleo crudo y otros productos básicos.

Entendiendo la Correlación

En términos sencillos, la correlación entre los precios de dos activos es la medida en que el movimiento de precios de un activo es similar al de otro. Un coeficiente de correlación entre el petróleo crudo y el gas natural de 0.25 indica que un cambio en el precio del petróleo podría representar el 25% del cambio en los precios del gas natural (en promedio, para el período discutido).

La correlación no es un indicador de causa y efecto. Más bien, simplemente muestra cuánto suben y bajan juntos: no indica que la subida de uno cause un aumento o una caída en el otro. De hecho, a menudo se debate cuánto pueden ser coincidentes estos cambios de precios, y mucho menos causales o correlacionados.

Fundamentos detrás de la Decreciente Correlación

Tecnologías como la fracturación hidráulica y la perforación horizontal han aumentado significativamente la producción de esquisto en EE. UU., ofreciendo posibles explicaciones para la desconexión de los precios del petróleo crudo y del gas natural en la última década. Debido a que el gas natural es un producto regional y el petróleo es una mercancía global, el aumento de la producción nacional ha reducido el precio del gas en relación con el precio del petróleo.

Las observaciones anteriores sugieren que el petróleo ha sido el factor dominante en cualquier relación observada entre los precios del petróleo crudo y del gas natural (en otras palabras, los precios del petróleo tienen una mayor tendencia a afectar los precios del gas natural que viceversa).

¿Por qué se piensa que los Precios del Petróleo Crudo y del Gas Natural están Vinculados?

Los precios del petróleo y del gas natural han estado vinculados debido a sus roles como fuentes primarias de energía y su potencial para servir como sustitutos en diversas aplicaciones. Históricamente, los precios del gas natural estaban indexados a los precios del petróleo, y la coproducción de ambos recursos de los campos de petróleo y gas conectaba aún más sus dinámicas de mercado.

Sin embargo, en años recientes, la relación entre los precios del petróleo y del gas se ha debilitado a medida que los mercados del gas natural han madurado, se han vuelto más independientes y han desarrollado sus propias fuerzas de oferta y demanda. El crecimiento del comercio de gas natural licuado, la creciente importancia de la producción de gas no asociado y el desarrollo de centros de precios y referencia específicos para el gas han contribuido a la desconexión de los precios del petróleo y del gas, reflejando la creciente independencia de los mercados del gas de los mercados del petróleo.

Conclusión

Basándonos en los patrones de precios observados durante la última década, es difícil argumentar que existe una correlación entre los precios del petróleo crudo y del gas natural. Si bien los Estados Unidos parecen tener una infraestructura equilibrada y un mercado establecido tanto para el petróleo como para el gas natural, en el resto de los mercados mundiales se observa una mayor dependencia del petróleo, lo que hace que la verdadera relación entre el petróleo y el gas siga siendo inconclusa, con indicaciones que apuntan a que el petróleo es el factor determinante.