Las empresas pueden incurrir en dos categorías principales de gastos: gastos generales y gastos operativos. Los gastos operativos son aquellos que una empresa incurre como resultado de sus operaciones normales. Estos varían de una industria a otra, e incluyen materiales, mano de obra y cualquier maquinaria involucrada en la producción.

Por otro lado, los gastos generales son costos continuos necesarios para administrar un negocio, pero no están directamente relacionados con la producción de bienes o servicios. Ejemplos de gastos generales incluyen el alquiler, los servicios públicos, el seguro y los salarios administrativos.

Tipos de Gastos Empresariales

Los gastos pueden dividirse en varios tipos, incluyendo costos de equipo, inventario y costos de instalaciones. Estos gastos empresariales pueden clasificarse en gastos generales o gastos operativos, dependiendo del tipo de negocio que se esté llevando a cabo.

Gastos Operativos

Los gastos operativos son incurridos por una empresa a través de sus operaciones comerciales normales. Estos gastos son necesarios; no pueden evitarse porque ayudan a que el negocio continúe funcionando. Los gastos operativos también son conocidos por la abreviatura “opex”.

Ejemplos de gastos operativos incluyen materiales, mano de obra y maquinaria utilizada para fabricar un producto o entregar un servicio. Por ejemplo, los gastos operativos para un embotellador de refrescos pueden incluir el costo del aluminio para latas, los costos de maquinaria y los costos de mano de obra.

Reducir los gastos operativos puede dar a las empresas una ventaja competitiva. También puede aumentar sus ganancias, lo cual puede ser beneficioso para los inversores. Sin embargo, las reducciones en los gastos operativos pueden tener un impacto negativo porque pueden perjudicar la rentabilidad de la empresa.

Gastos Generales

Los gastos generales son otro tipo de gasto empresarial. Son costos que no están relacionados con la mano de obra, los materiales directos o la producción. Representan costos más estáticos y se refieren a funciones comerciales generales, como el pago de personal contable y los costos de instalaciones.

Estos costos suelen ser continuos, independientemente de si la empresa genera ingresos. A diferencia de los gastos operativos, estos costos generalmente son fijos, lo que significa que pueden ser el mismo monto con el tiempo.

Los gastos generales no siempre son fijos; también pueden ser semi-variables. Los montos que deben pagarse pueden cambiar ligeramente con el tiempo. Los servicios públicos son un ejemplo de un gasto general semi-variable. El costo de la electricidad puede cambiar según el uso total.

Importancia de los Gastos Generales

Las empresas deben tener en cuenta los gastos generales para determinar su beneficio neto. Cuando las empresas desean aumentar la rentabilidad, generalmente revisan sus gastos generales. Si el negocio disminuye, reducir los gastos generales suele ser la forma más fácil de reducir los gastos.

Además, con el trabajo remoto volviéndose común, algunas empresas han reducido el tamaño de sus espacios de oficina. Esto les permite pagar menos en alquiler y otros gastos generales asociados con el mantenimiento de un espacio de oficina.

Conclusión

Los gastos generales y los gastos operativos son ambos tipos de gastos empresariales necesarios para administrar un negocio, pero difieren en cómo se relacionan con la producción de bienes y servicios. Los costos generales están relacionados con el negocio en general y suelen ser fijos. Estos costos pueden revisarse con frecuencia para realizar ajustes. Los costos operativos son los costos directos necesarios para producir un producto o servicio, y son difíciles de evitar.